Una semana más que empezaba de la mejor manera. Un lunes de jornada larga con mi CX y en compañía de Luís nuevamente que le está cogiendo el gustillo a su Orbea.
Como ahora las tornas han cambiado y entre semana no se puede ir donde uno quiera de Cataluña y nos limitan a un perímetro comarcal, pues nos ceñimos un poco a eso y esta semana en lugar de agarrar coche o tren para marchar lejos, salimos dando pedales de casa y alargamos la vuelta por nuestra zona. La verdad que nos podemos dar con un canto en los dientes por El Maresme abarca bastante territorio y tanto para ir por la montaña como para rodar por la costa, tenemos muchas opciones. Así pues, además de lo que ya conozco, añado algunos caminos para investigar un poco la zona más allá de Collsacreu y nos acaba quedando una ruta muy completa y entretenida.
Con Luís quedo en el Coll de Parpers, él en principio viene de Arenys de Munt y yo seguiría el camino de la cornisa hasta llegar al punto de encuentro, luego ya juntos, de charreta y con mucha guasa, iríamos haciendo km sin prisa pero sin pausa.
Salgo pronto por la mañana, dejo las calles de Tiana y el ayuntamiento aún iluminado.
A las 9 hay que estar en el punto de encuentro pero yo hasta allí ya tengo prácticamente 1000m+ así que no me puedo encantar con el ritmo o he de salir con bastante margen de tiempo.
Me encaramo a la Serralada Marina y sigo el GR-92 por el que veo salir el Sol sobre un Mediterráneo espléndido. Como estos días atrás y echando números, seguro que luego cuando regrese por la costa, lo veré pero ya esfumándose.
La montaña está espectacular, a esta hora solitaria, no hay nadie y además el terreno está, como se suele decir "al dente". Tierra un poco húmeda del rocío de esta madrugada pasada, olor a hierba mojada, temperatura muy soportable y nada de niebla.
Voy avanzando y pasando cada uno de los collados que cruza esta pista. Para cuando llego al coll de Òrrius, llamo a Luís y le digo que se venga por el camino de la cementera para hacer un corriol divertido antes de salir al Coll de Parpers.
Hola company!!! Venga va que nos lo vamos a pasar bien hoy...
Seguimos y para cuando llegamos ala urbanización de San Carles, para no ir por donde siempre, cambio la ruta y nos vamos hacia Dosrius por una pista de bajada muy chula con unas curvas de herradura...
La pista baja y la temperatura también, vamos de cabeza a la cubitera del Maresme y si hasta ahora no hemos visto ni un solo charco, a partir de que llegmos aquí abajo, quizás nos topemos con algunos tramos al más puro estilo CX Dendermonde jaja.
Pasamos por en medio del pueblo y luego cogemos la pista que nos llevará a Canyamars. Es cierto que aquí hace más frío pero por otro lado, las postales que ofrece este rinconcito del Maresme, son de escándalo.
Vamos perfilando la riera hasta que empezamos a subir ya sin parar hasta La Creu d'en Rupit. Parece que han echado pegamento en la pista, no veas como se engancha la bici y si ya subir cuesta, como para que encima te lastren así.
Primero por pista y luego por un corriol muy bonito, bajamos al Santuario de Virgen de Lourdes (una réplica de la cueva en Francia) antes de remontar hacia Collsacreu, punto donde empezará la zona más nueva y el trabajo de investigación.
Como buena investigación, siempre ha de haber algún gazapo, algún recorte que hacer en el trazado por que el track te lleva a algún callejón sin salida...cosas del directo you know.
Pero además de lo que yo he dibujado, Luís se conoce más esta zona así que entre una cosa y la otra, acabamos enlazando buenas alternativas y la ruta va ganando quilates.
En San Iscle de Vallalta paramos a rellenar los bidones y comer algo rápido de lo que llevamos encima. Este es un punto de inflexión de la ruta por que luego, nos volvemos a meter en el bosque y no sé cuando volveremos a toparnos con una fuente.
Hoy estamos un poco religiosos jaja, y si ya hemos pasado por el Santuario de la Virgen de Lourdes, ahora le toca a la Ermita de la Salut. Subimos por una cuesta primero cementada y luego ya por pista. Una subida larga que empieza siendo bastante cómoda pero que, poco a poco tornase más empinada hasta un punto en el el que además de la inclinación, hay mucha piedra suelta y más vale que tengas fuerza y vayas concentrado de donde pones la rueda por que si echas pie al suelo, será divertido arrancar de nuevo jajaja.
10km de ascenso sostenido y 600m+ de desnivel que hay que salvar para llegar al punto más alto de esta ruta, el Turò de Santa Maria del Montnegre y luego mantenernos sobre esta cota antes de empezar a bajar hacia Can Camps.
No sé como me lo monto que siempre que me "pierdo" por esta zona, acaba llegando a este punto. Debe tener cierto magnetismo jajaja.
Nos estamos acercando a Tordera y salimos por la carretera que sube desde allí a Hortsavinyà.
No llegamos a dejarnos caer hasta Tordera que damos un giro de 180ºC y en menos de lo que canta un gallo estamos subiendo otra vez y de que manera. Camino a Vallmanya, unas calles de urbanización muy empinadas que enlazan luego con una pista ya más llevadera, una bajada divertida y técnica en la que Luís sigue practicando. Lleva poco tiempo con la gravel pero yo creo que al final, si seguimos saliendo juntos le cogerá el gustillo a estas bajaditas jajaja ...eee company!!
Estas rutas, por más que al dibujarlas en casa te las mires y remires, siempre hay tramos que pueden ser pequeñas encerronas y es de agradecer que quien va contigo, no se queje y además, con una sonrisa y cachondeo vaya sorteando todo lo que venga. Además, todos estos km se hacen muuuucho mas amenos si vas hablando un poco de todo. Es lo bueno de la compañía en estas rutas, que si a mí ya de por sí me gusta hacer kilometradas y se me pasa el tiempo relativamente rápido, así es que ni me entero. Y claro que me duelen las piernas, claro que me canso y cuando veo una subida jodida digo..."para que habré metido la ruta por aquí", pero como lo disfruto más que lo sufro, pues eso, ni lo pienso. Voy haciendo pedalada tras pedalada mientras echo fotos, hablo, me río, me fijo en todo lo que me rodea en casa momento con lo que, horas y km caen "fáciles".
Paso por la Iglesia parroquial de Sant Miquel de Vallmanya
Que Luís para donde vamos? jeje
Salimos a la carretera de Hortsavinyà, justo donde acaba de coronar el puerto desde Calella, pero sólo hacemos un trocito por asfalto que rápidamente nos desviamos por una pista. Esto es parte de lo que quise hacer en mi ruta Llançà-Tiana y por el problema con la linterna no pude. Antes, unas rampas más de aquellas que uff, con los km ya duelen más jaja
Lo estamos gozando mucho, pistas muy bien pisadas, terreno top y escenario brutal. El cuerpo acompaña, la mecánica también y el clima está de 10...no se puede pedir más!!
Vamos dejando la montaña a nuestras espaldas y ya tenemos la mente puesta en la costa, en el mar, en la brisa que nos va a ir refrescando el rostro, o más bien, en el viento de cara que nos vamos a comer hasta casa jajaja.
Mini parada en la gasolinera próxima a Sant Cebrià de Vallalta para comer algo rápido, rellenar bidones y yo darle un manguerazo a la bici que la llevo fina de barro y la cadena chirría mucho.
Salimos del polígono por una pista y sorprendo a Luís con un paso que parecía no existir, y el me da a mi en toda la frente cuando después de llegar yo primero al final del camino y tener que medio saltar una vaya, llega él y abre la puerta y pasa como un señor jaja. Típica puerta que supongo que están para los coches por que ni va a ninguna casa, ni finca privada ni nada, el camino tiene salida al polígono...
Cruzamos Canet de Mar y entramos en el camino de la playa. Lo dicho, una buena dosis de viento en contra pero ya sabiendo que todo el desnivel está salvado. Él se quedará en Arenys de Mar así que lo sufrirá poco rato, yo me lo comeré hasta Montgat así que, una buena serie para acabar la jornada de hoy y como ya me imaginaba desde primera hora, ahora voy dando pedales disfrutando de una puesta de sol bellísima.
Al final, un rutón increíble de 133km con 3200m+ y que he gozado muchísimo con la buena compañía de Luís. Gracias company!!!
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