Así empieza uno de los muchos documentales que he visto sobre Australia sentado en el salón de mi casa. Desde siempre he sentido atracción por esta inmensa isla y muchas son las buenas razones que han hecho que este completamente enamorado de ella.
En 2008 cumplí un sueño y me fui a vivir allí, el que sin duda ha sido hasta ahora, el mejor año de mi vida.
Brisbane se encuentra al este de la Gran Cordillera Divisoria, al sureste de la cordillera Taylor y muy cercana a la bahía Moretón. Es la tercera ciudad más grande de Australia y capital del estado de Queensland.
Por aquel entonces ya pensaba en poder cruzar algún día el continente montado en mi bicicleta. Por un lado parecía una locura puesto que allí las distancias son enormes y dada la poca población que hay, algo más de 20 millones de habitantes para casi 8 millones de km cuadrados, sabes que puedes estar mucho tiempo solo y quizas no sea algo atractivo o como mínimo, algo que busque la mayoría de la gente pero para mí y en esta ocasión en concreto, ha sido mi principal motivación.
Durante aquel año pude moverme en bicicleta por los alrededores de la ciudad alimentando mi ilusión por conocer más y más todo aquello que me rodeaba. Junto con mis amigos Ash y Eli salíamos dando pedales de la urbe para adentrarnos por carreteras, en varios de los parques nacionales que teníamos tan cerquita de casa.
La cosa fue más allá cuando junto con Mónica, Gloria y Damiano hicimos el viaje más impresionante que he hecho hasta el momento. Primero volamos a Arlie Beach para pasar tres días con un velero por el Parque Nacional de las islas Whisundays. Luego tren hasta Cairns donde alquilamos una autocaravana y condujimos por toda la costa este hasta el Parque Nacional de Daintree. Más tarde hasta Darwin en el norte atravesando km y km de pistas de tierra bordenado el Golfo de Carpentaria para luego cruzar todo el Outback (el interior remoto y semi-árido de Australia) hacia el sur y llegar a Melbourne por la famosísima Great Ocean Road desde Adelaide. El viaje concluyó con una visita, también en autocaravana, a Tasmania y para cuando volvimos de nuevo a la ciudad yo ya tenía claro que alguna vez volvería a hacer algo parecido pero con mi bicicleta….
PERTH-BRISBANE
AUSTRALIA DE PUNTA A PUNTA EN BIBICLETA
2010, se acerca el verano y tengo la necesidad imperiosa de viajar, desconectar de todo e irme solo a encontrarme conmigo mismo. La idea que había tenido hacía un par de años empieza a cuajar y ahora se dan todas las condiciones para poder aventurarme en este proyecto.
Me pongo manos a la obra y empiezo a dibujar posibles rutas, contar km y días de vacaciones y a buscar información como un loco. Llevaba tiempo dándole vueltas al asunto pero no es hasta casi 2 meses antes de mi marcha que empiezo a mover fichas y hago algunas compras de material.
Ya tengo mi carrito Bob Yak pero hay un problema, ninguna de las bicis que tengo me servirá para lo que quiero hacer y menos para llevar todo el peso que he de cargar.
Los números se empiezan a disparar así que barajo la posibilidad de que alguien me pueda echar una mano en este aspecto. Mi buen amigo Albano me aconseja que vaya a hablar a Probike, me dice que seguro que me ayudarán así que como no tengo nada que perder me voy directo….
….se portan fenomenal conmigo y aceptan colaborar en este proyecto. Javier me atiende varios días para poder conseguir todo lo que necesito y finalmente conseguimos equipar perfectamente una Specialized Tricross y también me equipan a mí con un buen surtido de ropa made in Probike.
También me consiguen las cajas necesarias para poder embarcar todo en el avión y todo el material de repuesto necesario para que no me falte de nada durante la travesia.
Tras poner todas las posibles rutas sobre la mesa, decido empezar en Perth (costa oeste) y acabar en Brisbane (costa este) porque así podré visitar a los amigos que dejé allí un par de años atrás y porque no he visto nada de aquel lado de Australia.
Esto sería, más o menos, lo que saldría hacer la misma ruta por Europa
Contacté con Iván Faure, un trotamundos que ya ha pedaleado mucho por varios países de todo el mundo y que seguro me podría dar buenos consejos.
Tras su regreso de una de sus aventuras pudimos cuadrar un día y vernos para charlar sobre el tema. Sus consejos me fueron muy bien y pude anotar detalles que se me habían pasado por alto.
Ya estaba todo, el billete de avión, el backpacker en el que me alojaría a mi llegada a Perth, todo el material testeado y empaquetado y sobretodo una gran dosis de ilusión por empezar cuanto antes.
19 de Agosto del 2010, me había despedido de toda la gente que quiero y estaba solo en el aeropuerto del Prat de Barcelona. Estaba nervioso pero no por el viaje, sino por que llevaba muchísimo peso y si me cogían me tocaría pagar una buena morterada.
Tuve suerte y cuando hice el check-in me tocó una chica simpatiquísima que no me hizo pesar nada así que estupendo, el viaje no podía empezar mejor.
Ahora estoy tranquilo esperando en la puerta de embarque
El vuelo pasa por Milán donde hicimos una breve parada y luego directos a Singapore. Vuelví a volar con Singapore Airlines y se me volvío a hacer corto.
Ya me iba cargando de hidratos para lo que me esperaba jejeje
Había salido un jueves a las 10 de la mañana y he llegué a Perth el viernes siguiente sobre las 15h. Sin perder mucho tiempo me acerqué a una compañía de teléfonos que había en la misma Terminal y adquirí un número para usar el móvil en caso de emergencia. Acto seguido, y después de revisar un mapa, salí a la calle para montar el tenderete…
No me lo acababa de creer, estaba de nuevo en Australia, solo y apunto de escribir algo nuevo en mi CV con letras mayúsculas.
No me quedaban muchas horas de luz así que enseguida me puse a pedalear hacia el centro
Dios que sensación, ahora si que empezaba esto!!! Tocaba ir por el carril izquierdo y a la vez que pedaleaba me despejaba de tantas horas de avión. Pregunté a un chico si había algún modo de llegar al centro por alguna vía secundaria para ir más tranquilo y me mandó a través de una zona residencial que me brindaba estas vistas…
Primer día y ya llevaba casi 50km aunque ya casi había llegado.
Y aquí su Torre Agbar particular jeje
Me encontraba algo cansado y hambriento pero ya llegaba al backpacker. Me dieron la llave y subí a buscar mi habitación.
Me di una ducha y a pesar de la fiesta que tenían montada los de la habitación de al lado, enseguida me quedé dormido.
Sábado, tocaba ir de compras para completar mi equipaje. Agarré la bici con el carrito y me fui de paseo por la ciudad.
Aquí es donde pasé las 2 primeras noches
Aquí pude encontrar los fongoncillos, una sillita de camping, y algunas cosas más…
Mientras pedaleaba iba tomando instantaneas…
Y de pronto….
Menuda tromba de agua que cayó durante unos 20’. Esta es una de las cosas típicas de aquí, que puedes pasar de tener un día fabuloso a tener que ir a cobijarte bajo un techo por que aparece alguna nube de la nada, descarga y vuelve desaparecer.
Perth esta situada en el estuario del rio Swan. Cuanta con 1,5 millones de habitantes y es una de las áreas metropolitanas más aisladas de la tierra. La ciudad más cercana con más de un millón de habitantes es Adelaida, que se encuentra a 2.104 km de distancia.
Al igual que Brisbane, cuenta con grandes zonas verdes en las que la gente pasa gran parte de su tiempo libre, bien sea haciendo deporte, disfrutando de una BBQ con la familia, paseando…
Hay muchas zonas habilitadas para correr o pedalear envueltos de un bonito paisaje.
Los rascacielos pertenecen al CBD (Central Business District), la zona donde se encuentran las oficinas y el centro comercial.
Estas fotos están tomadas desde el parque de la Esplanade, a orillas del rio Swan.
El hambre apretaba de nuevo así que mejor sitio que este para comer un poco de sushi y las famosas Tim Tam.
Había comprado todo lo que me faltaba así que por último me fui a la comisaría para informarme sobre algunos aspectos a tener en cuenta antes de abandonar la ciudad y también para que me aseguraran si las vías que iba a seguir eran buenas y que no fuesen de prohibida circulación para ciclistas.
Por la noche tocaba organizar todo el material y hacer recuento para asegurarme de que no me dejaba nada. Todo suelto por la habitación está muy bien, pero cuando has de colocar todo esto en el carrito….
La comida…
La ropa…
Las herramientas…
Después de todo el día para arriba y para abajo y de dejarlo todo en su sitio caí redondo. Además me puse el despertador bien pronto ya que a eso de las 6:15 estaba saliendo por la puerta del backpacker.
Aún no había luz y después de haberse pasado casi toda la noche lloviendo, la temperatura era bien fresquita. Daba igual, aunque hubiese estado lloviendo tenía unas ganas locas de ponerme a pedalear y salir de la ciudad para rodearme de naturaleza.
No había nadie por las calles…
Iba en busca de la Brookton HWY. Esta me llevaría hasta Hyden que es el pueblo donde se encuentra la Wave Rock, mi primer objetivo del viaje y que luego ya veréis.
Enseguida empezaban las primeras rampas convirtiendo esta primera etapa en un día muy duro de pedaleo. Es cierto que era el primero, yo estaba fresco a pesar del viaje pero todo y con eso, hubo muchos tramos en que lo pasé bastante mal. Nunca había cargado tanto peso en el carro y menos aún había hecho 150km arrastrándolo. Entre carro y bici, un peso aprox de casi 60kg.
Apenas sales del área metropolitana te das cuenta que todo tarda más en llegar…gasolineras, pueblos…
Ya llevaba unas cuantas horas pedaleando y el cuerpo pedía gasolina así que cualquier sitio era bueno para parar a comerse un bikini de crema de cacahuete.
El paisaje iba mejorando con el paso de los km y cada vez me alejaba más del bullicio y el gentío para pedalear por zonas muy tranquilas y solitarias.
Las carreteras adoptaban formas rectilíneas y en lugar de curvas se daba paso a grandes ondulaciones del terreno.
Las fotos no hacen justícia de la variedad intensa de colores que se podían apreciar allí.
Después de algo más de 7h de pedaleo y casi 150 durísimos km llegaba a Brookton.
Era pronto pero decidí quedarme allí para pasar la noche. Era la primera que estaba fuera y quería calcular lo que tardaba en montar y organizar todo. Los días anteriores no presté mucha atención en ver a que hora anochecía así que tomaría referencias de todo.
Y este fue el sitio escogido, una mini esplanada cercana a un camino y alejada a unos 200m de la carretera que tenía que seguir al día siguiente.
En este primer día aprendí que no tenía que parar a comer tan pronto y aprovechar más las horas de luz para los días siguientes. También me di cuenta de que no llevaba ropa suficiente para pasar la noche cómodamente. Llevaba un saco que aguantaba los 5ºC y según lo que leí por Internet, las temperaturas no bajarían de 3-4ºC así que pensé que sería suficiente. Total que al ir apagándose el día me metí en la tienda e intenté descansar…
…cosa que me fue totalmente imposible. Mallas largas de invierno, una camiseta térmica de manga corta, una de manga larga encima, un chaleco, gorro y los guantes largos fueron insuficientes para evitar el sentirme entumecido durante toda la noche. La tienda parecía una cubitera, la humedad la dejó completamente empapada. Primera noche y primera lección aprendida así que durante el siguiente día había que encontrar algo para solucionar este contratiempo.
El sol apretaba por la mañana y no era el único que madrugaba para tomar la carretera.
Impresionan eee!!! Son los conocidos Road Trains y con los que compartiría muchos muchos km durante mi viaje. Los conductores, algunos más simpáticos que otros y algunos un tanto temerarios, normalmente saludaban y de vez en cuando les pedía que tocaran el claxon y ellos respodían.
En una ocasión me tiraron al suelo. Uno me adelantaba y otro venía de cara y claro como te pasan despacito…imaginaros un trasto de estos a un palmo del manillar, la ventolera es tal, que con un poco de mala suerte pues acabas en el suelo. Por suerte todo quedó sólo en eso.
Yo seguía mi andadura hacia Corrigin, el próximo pueblo.
Una estampa típica
Y otras también comunes. Aún no se el porqué de este tipo de arte jeje, pero por lo menos curioso es jeje.
Por fín empezaban a suavizar las pendientes así que a ratos podía rodar bastante rápido.
Los Equidnas podían hacer acto de presencia en cualquier momento jeje. Son mamíferos parecidos a los erizos pero que pueden llegar a medir 50cm y que se alimentan de hormigas. Por el día es más complicado verlos ya que son de actividad nocturna pero siempre puede haber algún despistado jeje. Sólo habitan la isla de Nueva Zelanda y Australia así que siempre está bien tener la oportunidad de ver cosas nuevas.
Se acercaba la hora de comer así que a mi paso por el pueblo de Corrigin hice una parada para reponer fuerzas.
Y no sólo me tomé un descansito sino que me fui de compras jeje. Sabía que a partir de aquí sería complicado encontrar algo para combatir el problema del frío por las noches. Me puse a buscar y tuve la suerte de encontrar una ferretería donde pude comprar el único saco de dormir que les quedaba.
2 sacos de dormir!!!! Ya se que pensáis que parece absurdo pero os aseguro que fue la mejor compra que hice. Dormía con el mío dentro de este y se acabó el sufrir por frío, o al menos tanto.
Me di una vuelta corta por el pueblo y de nuevo en marcha.
Esta vez aguanté pedaleando hasta las 5pm. Eso sería lo que intentaría hacer todos los días que pudiese. Pedalear hasta las 5pm para que a las 6pm que ya era de noche, tenerlo todo preparado y empezar a cenar. Durante ese día me pasaron cosas muy graciosas y no tanto con los algunos animales. Vi muchas ovejas que salían corriendo asustadas al verme pasar por la carretera. A la que una arrancaba a correr el resto detrás como locas y cuando vas todo el día solo, juegas y le hablas a todo jeje. Un montón de águilas y cuervos nutriéndose de los cuerpos que prmanecían sin vida sobre el asfalto, conejos atravesando el asfalto a ciegas, kangaroos atropellados en los arcenes y lo peor del día….los contínuos ataques de los Magpie. Son pájaros parecidos a las Urracas que tenemos aquí y son muy territoriales. El problema es que cuando están anidando y pasas cerca, lo más probable es que te lleves algún picotazo o como mínimo un susto por que muchas veces ni si quiera los ves venir. En una de las persecuciones, que a veces duraban más de 1 km, un de ellos me vino de frente y me dio de pleno en la cara. Suerte que llevaba las gafas, que quedaron dañadas, que sino igual aún estoy buscando mi ojo por allí jeje.
Bueno después de todo esto llegó la hora de parar y montar la tienda. Mirar que vistas cuando abría la ventana de mi casita jeje…
Casi al final de la etapa mientras pedaleaba por una recta larga sentí un crujido fuerte y noté que la rueda trasera cimbreaba. Seguí pedaleando y me di cuenta de que la rueda iba de lado a lado. Como estaba cansado y primero era montar la tienda y cenar, decidí echarle un vistazo por la mañana. Se habían roto un par de radios y no era un problema por que llevaba de recambio pero del peso que llevaba y el haber aguantado un tramo para buscar sitio donde acampar hizo que la llanta quedara un poco doblada y me fue imposible dejarla completamente alineada.
La cosa pintaba mal. Estaba a tan solo 14km aprox. de Hyden pero no quería pedalear con la rueda así. El problema no era el ir así con la rueda sino que el ir en esas condiciones y con tanto peso podría acabar de doblar la llanta con algún bache y entonces si que sería un problemón.
Oí el ruido de una camioneta que se acercaba y salí corriendo a la carretera. La paré y le comenté si me podía hacer el favor de acercarme a Hyden. Ningún problema, montamos la bici en la camioneta y de charreta al pueblo.
Me dejaron en esta gasolinera y me despedí de ellos
Al sol y bien sentando seguía probando el dejar la rueda en mejores condiciones pero no había manera.
Como me estaba poniendo nervioso opté por la opción de dejar todo el lastre en la gasolinera y irme con la bici a ver la Wave Rock que era para lo único que había venido a este pueblo.
La mujer de la gasolinera, amablemente, me guardó las cosas y yo me fui más tranquilo de excursión.
La tienda de la entrada no tiene desperdicio.
Y aquí es donde me encuentraba y de donde venía.
Y ahora pasen y vean
Busquen las 7 diferencias jeje
La Wave Rock constituye un acantilado de granito de unos 14m de alto por 110m de largo. Su forma redondeada ha sido causada por la intemperie y la erosión del agua. Se dice que su origen databa de 60 millones aproximadamente.
Esa gama de colores es causada por la lluvia y al agua de los manantiales que en contacto con la roca en los meses más húmedos lava los depósitos químicos formados por carbonatos e hidróxido de hierro dando como resultado rayas verticales en las gamas de grises, rojos y amarillos.
Desde lo alto de la roca se puede obtener una buena panorámica de la zona que la rodea.
Aquí me quedé sentado un rato simplemente observando y acabándome de creer donde estaba. Parece una tontería pero tuve esa sensación varias veces. Sabía lo que estaba haciendo pero no me lo acababa de creer y cuando me sentaba en algún sitio en silencio a observar el paisaje….inexplicable!!
Antes de abandonar la zona pude dar una vuelta por un circuito de unos 3-4km alrededor del parque. Había sitios un tanto tétricos pero tenían su encanto.
Este es el Lake Magic, un lago natural de agua salada en el que te puedes bañar tranquilamente. Yo no lo probé por que no hacía tanto calor pero hubiera estado bien.
Una vez acabada la visita tocaba volver a Hyden. Tenía que encontrar la manera de arreglar la bici o de conseguir que alguien me llevara a algún pueblo que tuviera una tienda de bicis o algo parecido. Me quedé en la salida del pueblo y mientras intentaba dejar la rueda lo mejor posible, buscaba conductores amables que me llevaran jeje
Tras varios intentos fallidos….
Menuda suerte que tuve. Este era el único autobús que pasaba por allí y me dijeron que la frecuencia es de cada 4 días. Creo que me tocó pagar $30 pero no me importó para nada. El único problema era que evidentemente no iría por la zona de pista que quería hacer yo y me desvié de la ruta 400km al sur para ir a Esperance.
Por otro lado me ahorré un día de lluvias, poco intensas pero bueno suficientes para acabar bien mojado.
Era una lástima por que realmente me apetecía cruzar esa zona desolada a través de Forrestania pero con la bici así no era lo más sensato. Además tampoco estaría mal ir al sur y ver un poco las playas de allí.
Durante el trayecto me senté cerca del conductor y fuimos todo el tiempo hablando. Yo me iba informando y él me preguntaba cosas acerca de mi viaje. John, que así se llamaba, llamó a una tienda que conocía en Esperance para ver si estaría abierta para cuando llegáramos nosotros pero sería tarde así que me tocó hacer noche allí e ir a primera hora del día siguiente a la tienda.
Pasé la noche en un caravan park donde compartí mesa cenando con Marc y Devy, una pareja de Melbourne que estaba haciendo ruta con su 4x4. Acabé con mi cena y con la suya jejeje. Habían cocinado macarrones para un pelotón entero así que me puse hasta arriba. Luego llegaron Yong y Kyang, dos amigos coreanos que venían de Perth sólo para pasar unos días aquí y con los que también estuve hablando un rato mientras compartíamos la cena…hay que probarlo todo jeje.
Cosas curiosas de la vida, mientras cenabamos comenzó un programa de televisión que hablaba del Camino de Santiago y los coreanos, que conocían algo acerca empezaron a preguntarme un montón de cosas el camino y de España jeje.
Era tarde y me fui a dormir. Al día siguiente quería levantarme pronto y dar una vuelta por la playa antes de que abrieran la tienda.
Eiii, os habéis fijado bien? Si si, lo que hay en la arena es una foca bien grande. Mirar que bonita
No quise bajar a la arena para no molestarla pero me quedé un buen rato allí observándola. Estas son las cosas que más me gustan de los sitios así. Esa facilidad de poder ver animales a los cuales estoy acostumbrado a ver en los documentales o como mucho encerrados en un zoológico.
Ya iba siendo la hora de ir a la tienda, tenía que arreglar la rueda pronto y ponerme en marcha. Empezaba a agobiarme pensando en que iba retrasado y que tendría que apretar para recuperar el tiempo perdido. Según los calculos tenía días suficiente pero claro después de haberme pasado esto en la segunda etapa y con tantísimos mk aún por recorrer, es inevitable darle más vueltas a la cabeza de lo necesario.
Chris consiguió dejarme la rueda bien. Estaba bien doblada y me dijo que no pusiese peso encima del portabultos. Las llantas no eran tan robustas para soportar tanto peso así que después de salir de allí, entré en el menú de ajustes y cambié la configuración del equipaje de la bici jejeje
Así iría el resto del trayecto, sólo llevando en el portabultos las dos esterillas y el trípode en lugar del petate con la tienda, los sacos y algo de ropa.
Bueno había que ponerse de nuevo a pedalear y ahora tenía 200km hasta Norseman, primer punto psicológico de la ruta
El día pintaba mal, el viento soplaba con fuerza y las nubes con tono gris oscuro amenazaban con descargar de un momento a otro. Paré en cualquier sitio para llenar un poco el depósito.
Solía pedalear todo el tiempo y sólo paraba para ir al “baño” o para comer algo tranquilamente. Las rectas onduladas se hacían muy largas y necesitaba parar en una taverna a comprar una bebida energética.
Además el tipo de asfalto no ayudaba nada. Las carreteras no son lisitas como la mayoría de aquí. Son como un conglomerado de piedra que te deja los brazos muy fatigados al final de cada jornada y evidentemente la bici no rueda igual.
Todo y con eso, era la mejor etapa de las que llevaba. Salía a las 10am de Esperance y cuando me paraba a las 5pm llevaba 160km. Había rodado a una media algo superior a los 24km/h y ya acumulaba más de 22h de pedaleo.Y además me entretenía mirando escenarios como este.
Ya era hora de parar y buscar sitio para pasar la noche.
Y para cenar. Tocaba arroz con nuddles.
Por las noches siempre repasaba la ruta, los km que tenía que hacer, el tiempo que me podría llevar según como iba viendo el terreno. Supongo que era una manera más de entretenerme.
Me llevé un par de libros y fue un peso totalmente inncesario. Después de los tutes durante el día no me quedaban ganas de ponerme a leer y encima con el frontal.
Y luego me quedaba en la más absoluta oscuridad.
Alguna noche podía escuchar a mis visitas. Supongo que atraídos por el olor de lo que había cocinado, los Bandicuts venían algunas noches a rascar la arena por debajo del faldón de mi tienda. Son unos mamíferos marsupiales algo más grandes que las ratas y por los que no había que preocuparse lo más mínimo.
Por la mañana daba mucha pereza cambiarse. Todo estaba helado y fuera hacía mucho frío pero aún y así, procuraba salir pronto para tener el máximo de horas de luz.
A las 7 ya estaba pedaleando y ponía rumbo a Norseman que estaba a unos 40km.
El ritmo era bueno y mantuve una media de 25km/h. Pronto llegué al pueblo y la verdad es que no había mucho que ver.
Esta caseta estaba cerca de un motel llamado Collie. Pregunté si me podía quedar allí y me dijeron que no había problema. Por la noche me acerqué a prepararme la cena a las mesas que había fuera del motel para no gastar luz. La noche era fría y allí no había nadie. Mientras cenaba y escribía un poco, Marian, la dueña del motel, salió y me ofreció cenar dentro ya que hacía mucho frío. Entré y compartí mesa con Masi jeje,
Y no todo quedó ahí, después de cenar Marian me comentó que ellos tenían habitaciones para dormir. Claro y estaba viajando con mi tienda y quería intentar evitar pagar alojamiento ya que ese dinero prefería gastarlo en comida pero ella insistió ofreciéndome alojamiento gratuito. Decía que venía una tormenta, que haría mucho frío por la noche y total, no había nadie en las habitaciones así que mejor que me quedará en una de ellas ya que le sabía mal dejarme allí fuera.
Una vez más un detallazo de la gente que me fui encontrando y a los que les estoy enormemente agradecido.
Después de tantas noches durmiendo en la tienda, esta habitación era como una suit de un hotel de 5 estrellas
Toda la habitación para mí, dormiría calentito sin ruidos de viento y encima sin el inconveniente de la tormenta que estaba de camino.
Parecía que esto era un premio a los dos días que llevaba de brevets caseras jeje. Estaba destrozado pero con el ánimo por las nubes ya que por fín salía de la zona desolada para empezar a ver cosas nuevas y hacer zona de montaña que sabía que sería muy duro pero seguro que tendría su encanto.
Se cumplieron los pronósticos y la mañana siguiente se levantó empapada. Ni un solo rayo de sol entre tanta nube densa y el gris era el color dominante. Me separaban unos 40km de Gilgandra y serían los únicos que haría en ese día ya que fueron casi 2h bajo la lluvia y acabé harto.
Un kangaroo cruzó la carretera a pocos metros de mí y lo pude grabar con la cámara y luego unas cuantas vacas jugaban conmigo mentras iba dando pedales. Corrían a mi lado en fila india y una detrás de la otra para luego pararse de nuevo una al lado de la otra y mientras me miraban como si me estuviesen haciendo el pasillo típico de los fútbolistas. Fue graciosísimo y me dejó un poco parado, nunca había visto algo igual.
Al llegar a Gilgandra busqué un lavabo para cambiarme la camiseta y el mallot por que estaba empapado El impermeable hace algo pero despuésde casi 2h….
Los malos de la pelí llegaron antes que yo jeje
Iba en busca del centro de información para ver si había algo interesante para ver, buscar un sitio para plantar la tienda y preguntar por la biblioteca pública.
Estaba helado y lo peor es que las botas estaban empapadas y viendo el día sería imposible tenerlas secas para el siguiente.
Conseguí meterme en un jardín abierto que tenía un cobertizo perfecto para mi tienda
Otra noche más sin agua y protegido del viento. Era hora de ponerse las bambas e ir a hacer algo de compra para la cena. Estaba claro que habiendo un super por allí y después de las palizas que llevaba encima no iba a comer otro sobrecito de pasta jeje. Fui a la pollería y me encargué un pollo a l’ast para mí solito jeje.
Dejé todo en la tienda, aquí no me preocupaba ya que nadie toca nada y me fui a la biblioteca para enviar unos mails a la familia y amigos..
Pude estar un buen rato y echar un vistazo a la meteo para el siguiente día. No tendría un día radiante de sol en la zona pero con un poco de suerte me libraría del agua.
La noche se me hizo larguísima gracias a una gotera que había en el techo de aluminio. Me tocó levantarme un par de veces para mirar de solventar el problema ya que era más sencillo eso que mover toda la parafernalia a otro sitio.
Salí de nuevo de la tienda a las 6am pero llovía demasiado así que esperé un ratito estirando en la tienda.
Al rato paró y empecé a recoger la tienda pero como no se cortaba el grifo definitivamente salí sobre las 9am y con la calma.
Mi idea era llegar a Coonabarabran, unos 92km más al noreste. El paisaje es muy bonito pero la carretera es un continuo sube baja que se hace muy duro.
Por delante me quedaban varios días así con lo que había que tomarselo con calma.
De todos modos, a pesar de lo que costaba, pedaleaba con otra actitud. El nuevo escenario me gustaba más y anímicamente me sentía con fuerzas y cuando la cabeza te dice que tires….vas hacia delante como sea.
Como había salido tarde y había costado tanto llegar, por aquel día ya era suficiente. Con las vueltas que di por el pueblo para buscar sitio y demás, me salieron algo más de 100km. Había sido un día duro y las piernas pedían clemencia.
Busqué el centro de información para preguntar por el tiempo y una zona de acampada libre. Después de estar un rato hablando con la mujer de allí me fui al super a comprar algo y luego a plantar la tienda.
En el día de hoy había batido un record. Velocidad máxima del viaje…81.9km/h y con el carrito jejejeje, ahora eso si, no lo haría más jeje, pasé un miedo… me lancé por una de esas mega cuestas sin frenar y luego no había narices a hacer otra cosa que no fuese mantener el manillar firme y aguantar. Los fabricantes del carro recomiendan no pasar de 40km/h y a mi se me fue de las manos jeje. Con tanto terreno ondulado, vas todo el tiempo con cambios muy bruscos de velocidad. Pasas de bajar a 67km/h a subir a 10km/h en segundos y así continuamente. Lo cierto es que si bajas así de rápido y encuentras algún agujero, piedra o lo que sea en mitad de la carretera…sujeta bien el manillar y reza por que no puedes esquivar estos imprevistos como si fueses con tu bici normal y al más mínimo movimiento a tanta velocidad se mueve todo demasiado.
Bueno este sería mi hogar por esa noche. Era perfecto, con techo de nuevo, apartado del ruido y gratis. Antes de este encontré otro sitio muy chulo pero no me di cuenta que era un trozo de jardín de un club de tenis, la parte trasera, y después de tener la tienda montada tuve que deshacerlo todo y moverme a otro sitio.
Vaya mesa para cenar eeee
Mientras estaba por allí vi un chico que llevaba un equidna en sus manos
Estuvimos un rato hablando y me explicaba que se lo había encontrado debajo de su casa y que lo iba a soltar a la montaña. Le pregunté si le importaba que fuese con él y como me dijo que no, pues allí lo dejé todo y nos fuimos a soltar al animalillo.
Allí mismo se enroscó y cabó un agujero en el que posiblemente pasaría la noche.
Mi noche fue tranquila. Se esperaba tormenta pero quedó todo en 4 gotas. Por la mañana me puse pronto a pedalear por que el día iba a ser largo y duro…
Ya me lo había advertido mucha gente que no sería fácil cruzar por esta zona. Me encontraría con subidas con mucho % de escándalo y muchos km así pero bueno, también era un atractivo añadido a la ruta. Había que cruzar la Great Dividing Range (Gran Cordillera Divisoria) y no iba a ser un simple trámite.
La Gran Cordillera Divisoria es la cadena de montañas más importante de Australia. Esta se extiende por más de 3500 km, desde el extremo noreste de Queensland, a lo largo de toda la costa oriental atravesando Nueva Gales del Sur, y el estado de Victoria más al sur, hasta el extremo sur del continente, donde tuerce hacia el oeste y finaliza en la inmensa planicie central en los Montes Grampianos, en el estado de Victoria.
Parecía que los km pasaban más lentamente, de hecho no sólo me lo parecía, era una realidad a consecuencia de la exigencía del terreno pero bueno era parte del reto y la motivación por superarlo era mayor que el sufrimiento acusado de tantos km y tantas subidas desquiciantes.
Aunque de vez en cuando el terreno era favorable y era una auténtica gozada pedalear sintiendo la brisa fresca en la cara de una tierra que me encanta y también sintiéndome tan libre, sin horarios, sin prisas y disfrutando de lo que me rodeaba.
Y llegabamos a Gunnedah, tierra de Koalas…
…y donde a nosotros, los ciclistas también nos tienen bien considerados jeje
Gunnedah está situada en el centro del Valle de Namoi y está a tan solo 440km de Sydney. Es una zona que ofrece una gran calidad de vida y donde se puede disfrutar de mucha zona verde a lo largo de todo el condado que cuenta con 5000km cuadrados de extensión.
Sería pues, parada obligada para dar una vuelta tranquilamente por sus calles y para reponer un poco de fuerzas. Era la 1pm y llevaba 110km pero para llegar a tamworth que era el objetivo del día aún tenía que recorrer unos 80 más.
Justo antes de llegar me pasaron un par de cosas, una divertida y otra no tanto. La que no lo fue tanto tuvo que ver con la cámara de fotos y es que bajando por la carretera a unos 65-70km/h se giró la funda de la cámara, que la llevaba en el manillar y se abrió el velcro con lo que la camará se fue al suelo. Lo bueno fue que me enteré por que al impactar con el suelo la cámara salió disparada hacia arriba y no me pego en la cara por muy poco. Por suerte la pude recuperar y como una campeona siguió haciendo fotos pero si que es cierto que a veces el enfoque ya no lo hace del todo bien jeje.
Y lo divertido fue que al cabo de unos 5 minutos de que me pasara esto y en otra bajada en la que iba rapidito se me cruzo una especie de jabalí muy raro por la carretera y de un tamaño considerable. Era muy raro por que para mi era un jabalí pero tenía el pelo como amarillo a topos negros…nunca había visto algo así, o era un jabalí fashion o era primo hermano del marsupilami, el de los dibujos animados jeje. La cosa es que me dio por pensar todas estas tonterías y no veas las risas que me eché yo solo mientras pedaleaba.
Bueno una vez que ya paré a comprar en un super, estuve un rato hablando con John, un hombre de allí que estaba fascinado con el carro. Era ciclista y llevaba mucho tiempo pensando en viajar por Australia y buscaba un modo de cargar con los bultos comodamente. La charla fue muy agradable y después de un rato me comentó que para cuando saliera del super me acercará a la paradeta que tenía montada de bocatas para seguir hablando mientras me invitaba a comer algo.
Un rato genial y un descanso merecido pero había que continuar.
Los km restantes a Tamworth no fueron tan duros. El haber repuesto fuerzas se notó y también estaba muy animado así que conseguí llegar y cumplir con el objetivo del día. De por medio carretera y mucho paisaje verde.
Y por fin…
Al llegar llevaba un subidón bestial. Estaba que me subía por las paredes de contento. Llevaba varios días un poco cabizbajo por varias razones y por primera vez volvía a estar tan contento. Además este era un punto muy importante del mapa, ya tenía Brisbane a tiro y mi aventura estaba llegando a su fin pese a que me quedaban unos cuantos km y de los más duros.
200km de etapa y 8h de pedaleo a través de una zona realmente complicada, ese era otro motivo por el que estaba tan contento.
Vuelta al super para comprar un poco. Atrás quedó aquello de no encontrar nada por el camino para reponer. Me di un paseo por el pueblo y busqué un sitio para pasar la noche.
Tamworth es muy conocida por ser la capital de la música country en Australia y se celebra un festival de música muy popular a finales de enero y que es el segundo mayor del mundo.
Está situada a mitad de camino de Brisbane y Sydney. Esto me creó un poco de duda porque como iba muy bien de tiempo se me pasó por la cabeza bajar primero a Sydney y luego hacer todo el tramo de costa que separa Sydney de Brisbane pero no tenía ganas de encontrarme con el follón de coches y también tenía muchas ganas de llegar a Brisbane para descansar y estar con mis amigos así que la duda me duro poco.
Mientras daba vueltas vi esto…
…estuve apunto de meterme para soltar piernas jejejeje.
A unos 4-5km se encuentra el mirador de Oxley, el Tibidabo de aquí y pensé que sería un sitio interesante para pasar la noche y poder ver el amanecer desde lo alto de la montaña pero varias personas me lo desaconsejaron por que era sábado y mucha gente subía allí a beber y demás e igual me encontraba con algún gracioso que me pudiera dar algún problema.
Pasé a preguntar por 2 o 3 sitios y a cual más caro, por tan solo plantar la tienda me cobraban 27$ así que me alejé del centro y subí por una urbanización hasta que encontré una zona plana con césped. Se me hizo de noche pedaleando para arriba y para abajo así que enseguida que acabé de cenar me puse a dormir.
La noche muy tranquila y el comienzo de la mañana muy ruidosa. Me había colocado muy cerca de un árbol que estaba lleno de cotorras y menuda serenata a las 5am.
Sin darme cuenta, ya que llegaba de noche, me metí de nuevo en un jardín privado jeje, es lo que tiene no tener berjas en las casa y como aquí no tienen problemas de espacio.
John me comentó que a partir de aquí vendría lo peor. Que para salir de Tamworth debía pasar algunos puertos y que tenían desniveles importantes y la verdad es que no se equivocó.
Salí sobré las 6am y hacía un frío espantoso pero como nada más salir la carretera picaba hacia arriba se disimulaba un poco. Y la prueba del frío de todos estos días, mi labio que no se curaba ni a tiros por más cacao que me pusiera.
Que mal lo pasé en estas rampas. No podía pasar de 6km/h y con el molinillo puesto. Pedaleaba todo el tiempo que podía de pie por que sentado era darle demasiada caña a las rodillas y montones de veces quería poner el pie en el suelo pero imagino que es en esos momentos donde aparece esa vena competitiva con uno mismo que hace que tires para adelante y no pares hasta llegar como mínimo a arriba.
Pero todo lo que sube baja y si no baja llanea jejeje
Paso por el pueblo de Uralla
Ya estaba sólo a 25km de Armidale que sería mi siguiente parada para pernoctar. Llegaría con 111km y sobre las 2pm pero no continuaría ya que tenía ganas de hacer las cosas con calma que ya había corrido bastante el día anterior.
Este parecía un buen sitio para plantar la tienda si no hubiese sido por que al ver mis intenciones, un municipal me advirtió que estaba prohibido.
Este es Michael, del caravan park donde dormí. Un tio muy simpático con el que pasé un buen rato hablando. Le conté un poco lo que estaba haciendo y el luego se lo contaba a todo el que entraba por allí. Cuando después de ducharme le fui a llevar los trastos para recargarlos tenía un corrillo de gente allí y les estaba contando la película a todos jejeje, luego me tocó a mí. Fue muy divertido y enriquecedor el poder compartir mi experiencia y que ellos hiciesen lo propio con las suyas.
La mujer del centro de información me comentó que este era el pueblo situado a mayor altura de Australia, a 1110m sobre el nivel del mar y en la cresta de las montañas. Por estas fechas los termómetros registran temperaturas de hasta -5ºC y durante la noche que yo estuve allí marcó -1ºC.
Michael me comentó un par de sitios que podría ir a ver cuando dejara Armidale y me describió un poco el terreno que tenía por delante. En teoría debía ser favorable ya que salía del punto más alto y me dirigía hacia la costa pero me tocó pasar por zonas muy, pero que muy exigentes.
La primera visita recomendada fue a las Wolomombi Falls, unas cascadas espectaculares que se encuentran en el Parque Nacional de Oxley y unas de las más grandes de Australia.
Aquí pasé un rato sentado mirando y escuchando…valía la pena. Luego salí de este parque para ir a ver otras cataratas. Por el camino estuve de charreta con estos 4 jejeje, les di un poco de hierba y a cambio posaron ante la cámara jeje.
Luego un trayecto corto…
Y de nuevo a quedarme embobado con otras cataratas. Las Ebor Falls
Tocaba seguir mi camino dirección Grafton pero estaba un poco confuso ya que en ningún momento vi carteles que me marcaran distancias y para colmo tenía referencias de pueblos por los que no pasé. Mientras yo seguía haciendo km…
Y subiendo rampas…
Y atravesando parques nacionales…
Y puentes con quita miedos a la altura de la cabeza jeje
Empezaba a ir justo de tiempo y pensando en encontrar el pueblo de Clouds Creeck para pernoctar cerca de allí pero debía ser un pueblo fantasma jeje. Yo venga a tirar por que tampoco podía hacer otra cosa pero el pueblo nunca llegaba. Fijaros en las últimas fotos…donde iba a plantar la tienda, era como una selva y muy cerrada sin un solo sitio plano y sin vegetación para acampar.
El día estaba feo sin nada de luz. Pero por aquellas casualidades de la vida, cuando más empezaba a ir justo de luz salí a una zona un poco más abierta y primeros rayos de sol del día…
Al final y ya anocheciendo encontré un sitio estupendo para acampar
Estaba a unos 4k de Nymboida y con la tontería de ir tirando tirando me quedé a tan solo 35km de Grafton.
Nymboida es conocido por un centro de canoas que esté cerca de donde acampé pero de pueblo nada de nada, pasé un par de casitas, un pub y se acabó.
Estaba cerca del río y pensé en irme a dar un bañito pero en cuanto puse los pies a remojo me di cuenta de eso, que sólo metería los pies jejeje, el agua estaba helada así que nada de bañito.
Por la noche me puse a hacer cuentas y hasta el día ya casi llevaba una media de 180km diarios y sumándolo todo desde Perth 4255km. Me quedé frito con la libreta en la mano y dormí del tirón hasta las 5:25am. Me desperté a causa de una ligera llovizna que se precipitaba encima de mi tienda. La temperatura subió y pude dormir, por segunda vez en lo que llevaba de viaje, con un solo saco.
Como no llovía mucho ni esperé a ver si paraba, arranqué dirección Grafton.
En estos km mis compañeros de viaje… los kangaroos…
El camino mucho más sencillo que el de ayer en su inicio pero de por medio tuve que superar verdaderas paredes.
Entraba a Grafton y ya tenía claro que no perdería mucho tiempo ya que quería llegar a la costa, necesitaba ver el mar.
Ahora si que se notaba un cambio importante. Mucho coche, vías rápidas, mayor cercanía entre pueblos…Yo a lo mio y después de tanta montaña en los últimos días, en el llano volaba jeje. Aún soplando el viento en contra, éste ya no era un problema después de pasar lo que pasé en la Nullarbor.
Algunos aficionados en la carretera animando jejeje
En Maclean hice una pardita para comer. Los primeros en darme la bienvenida fueron este grupo de zorros voladores, son como los murciélagos que conocemos de aquí pero mucho más grandes.
No se aprecia muy bien, pero estas naranjas eran enormes y la dueña de la fruteria me invitó a tres de ellas y estaban riquísimas.
Es un pueblecito muy bonito asentado a orillas del rio Clarence y que parece gozar de mucha tranquilidad. Tiene un toque de pueblo recién restaurado y si te paseas por el boulevard es como si echaras la vista atrás en el tiempo.
Hay una asociación que se formó en 1986 que trabaja para promover los origenes escoceses de Maclean. El trabajo de este comité a lo largo de todos estos años ha servido para que Maclean tenga un reconocimiento nacional e internacional como “El Pueblo Escocés” de Australia.
Pasé por Woodburn, otro pueblo en el mapa y me tocó hacer 40km bajo un aguacero importante que me dejó completamente empapado.
Próximo destino Ballina….la señal verde me indicaba que ya sólo me faltaban 50km.
Al final del día casi 200km a algo más de 25 de media.
Iba rodando super bien, cómodo, feliz y disfrutando mucho. Ya estaba llegando a la costa de nuevo y sólo por eso iba con una sonrisa de oreja a oreja.
Ballina, pueblo costero en la desembocadura del rio Richmond y habitat natural de las gambas más grandes del mundo. Mar, playas espectaculares, surf….
Al final del día casi 200km a algo más de 25 de media.
Iba rodando super bien, cómodo, feliz y disfrutando mucho. Ya estaba llegando a la costa de nuevo y sólo por eso iba con una sonrisa de oreja a oreja.
Ballina, pueblo costero en la desembocadura del rio Richmond y habitat natural de las gambas más grandes del mundo. Mar, playas espectaculares, surf….
Fue lo primero que hice al llegar, irme directo a la playa a sentarme un rato a ver el mar y escuchar el romper de las olas. Aún no había llegado a Brisbane pero ya había de recorrido Australia de costa a costa…era como ya un sueño cumplido y el objetivo de Brisbane lo tenía a tiro de piedra.
Mientras pedaleaba por allí muy tranquilo iba buscando sitio para acampar. Esto ya no era el desierto ni los bosques de los últimos días y no puedes plantar la tienda donde te parezca por que te puedes llevar una buena multa así que había que buscar un sitio escondido o un caravan park. Después de preguntar en varios y ver que eran caritos encontré uno un poco retirado, a unos 8km del pueblo, pero era perfecto, tranquilo y con playita a 50m de la tienda…y que playita!!
Por el caminito que se ve al fondo de la imagen se accedía a la playa. Sería un sitio magnifico para desayunar al día siguiente, menudo lujazo, ojalá lo pudiera hacer todos los días.
Bueno una vez montada la tienda y recogido todo me fuí al pueblo. Hice los 8km con la bici sin carro y sin peso y era incapaz de pedalear de pie jejeje. Acostumbrado a llevar tanto peso si me ponía de pie no podía controlar el manillar, era una sensación rarísima. Pero la gran diferencia era que sin llevar el carro pedaleaba casi sin darme cuanta a 37-38km/h, sin ningún esfuerzo jeje.
La intención era pasar por la pizzeria a darme un homenaje y cenar sentado en algún parque pero no se porqué no había luz en ningún sitio.
Mientras pedaleaba por allí muy tranquilo iba buscando sitio para acampar. Esto ya no era el desierto ni los bosques de los últimos días y no puedes plantar la tienda donde te parezca por que te puedes llevar una buena multa así que había que buscar un sitio escondido o un caravan park. Después de preguntar en varios y ver que eran caritos encontré uno un poco retirado, a unos 8km del pueblo, pero era perfecto, tranquilo y con playita a 50m de la tienda…y que playita!!
Por el caminito que se ve al fondo de la imagen se accedía a la playa. Sería un sitio magnifico para desayunar al día siguiente, menudo lujazo, ojalá lo pudiera hacer todos los días.
Bueno una vez montada la tienda y recogido todo me fuí al pueblo. Hice los 8km con la bici sin carro y sin peso y era incapaz de pedalear de pie jejeje. Acostumbrado a llevar tanto peso si me ponía de pie no podía controlar el manillar, era una sensación rarísima. Pero la gran diferencia era que sin llevar el carro pedaleaba casi sin darme cuanta a 37-38km/h, sin ningún esfuerzo jeje.
La intención era pasar por la pizzeria a darme un homenaje y cenar sentado en algún parque pero no se porqué no había luz en ningún sitio.
Total que con un par de pizzas en la mano iba con la bici corriendo como un loco para que no se me enfriaran y por que ya era de noche y subía los repechos a casi 40km/h jeje. Las pizzas duraron bien poco y luego me fui a la playa a sentarme de nuevo para hacer la digestión antes de irme a dormir y para relajarme un rato. Estaba solo, totalmente solo y lo remarco por que yo no es que sea precisamente el tio más valiente del mundo pero en este viaje no he sentido miedo. Ese miedo que se podría tener por estar acampado sin tener nada ni nadie en 300km a la redonda, de pensar si te puede pasar esto o aquello, de estar como ese día solo en la playa de noche y no era un playa como la de la vila olímpica con gente alrededor y bares a tus espaldas….no se, simplemente me quedaba embobado sin pensar para nada en ello, me emborrachaba de tanta magnificencia y me recordaba a mi mismo lo que estaba haciendo sin acabar de creermelo. Pensaba en mis cosas y trataba de organizar mi mente en un ejercicio de reciclaje interior que de verdad recomiendo a todo el mundo. Experiencias como esta hacen que veas la vida de diferente modo. Por lo menos es lo que me ha pasado a mí.
Tras casi quedarme allí mismo dormido, me levante y me fuí a la tienda pero sólo por un rato. Por la mañana, madrugón y a contemplar el epectáculo mientras me comía algo de fruta y un par de sandwiches de nuevo sentado en la arena de la playa.
El reto ya estaba casi conseguido…
Con la calma luego agarré la bici y a pedalear costa arriba hacia Byron Bay, el lugar deseado por cualquier surfero.
Vaya cambio de escenario, las sensaciones eran totalmente distintas después de haber estado tantas horas pedaleando sin compañía. Ahora compartía asfalto con mucho más tráfico pero tampoco le prestaba mucha atención ya que mantenía la mirada perdida en el azul.
Parada en uno de los miradores.
Con la calma luego agarré la bici y a pedalear costa arriba hacia Byron Bay, el lugar deseado por cualquier surfero.
Vaya cambio de escenario, las sensaciones eran totalmente distintas después de haber estado tantas horas pedaleando sin compañía. Ahora compartía asfalto con mucho más tráfico pero tampoco le prestaba mucha atención ya que mantenía la mirada perdida en el azul.
Parada en uno de los miradores.
En mitad de la bahía había ballenas pero mi cámara no llegaba a captarlas bien. Tras la parada continué hacia Byron Bay.
100% Surf
100% Surf
Eiii con una como esta viajé por Nueva Zelanda en 2009
Un sitio para quedarse a vivir…luego una tachuelilla en el camino jeje, había que ir a ver el faro y para ello tocaba subir. Allí me encontré con el primer ciclista del viaje que subía a muy buen ritmo.
Ahora siiii!! Estaba en el punto situado más al este de Australia, el Cabo Byron.
Viendo el faro podría decir que estaba en Grecia jeje
Un sitio para quedarse a vivir…luego una tachuelilla en el camino jeje, había que ir a ver el faro y para ello tocaba subir. Allí me encontré con el primer ciclista del viaje que subía a muy buen ritmo.
Ahora siiii!! Estaba en el punto situado más al este de Australia, el Cabo Byron.
Viendo el faro podría decir que estaba en Grecia jeje
Si os fijais bien vereis que no muy lejos de los surfistas había un grupo de unos 20 delfines. Y un poco más mar a dentro tambián había ballenas, increible.
No veas lo que me costó subir estas rampitas jeje
Era pronto así que decidí seguir subiendo por la costa. No tenía ninguna parada planeada así que iría haciendo y pararía donde me apeteciese.
Pedaleaba por una vía rápida. No estaba muy seguro de que estuviese permitido pedalear por ella hasta que vi…
Que poco me quedaba
Un poco de energía no me vino mal.
Y os presento a Matt. Este surfero que me paró en la carretera para ofrecerme algo de agua y fruta. Hablamos un rato en el arcén, era surrealista, como si te paran en a C-17 y te pones a cascar allí como el que no quiere la cosa jeje.
Total, venía de surfear de Byron Bay e iba a Sothport a casa de un colega y me dijo que si yo llegaba hasta allí tenía casa para dormir, ducharme y lo que hiciera falta….esto no pasa en todos los sitios.
Aún estaba a algo más de 50km de allí. Intercambiamos números de teléfono y cada uno a seguir por su lado.
De camino a Southport
Bienvenidos a Coolangatta!!! Normalmente la gente de Brisbane pasa sus fines de semana playeros por esta zona.
Típica caseta de socorristas
Con vistas a Surfers Paradise y la Gold Coast, que son destinos turísticos por excelencia de la mayoría de australianos.
Era pronto así que decidí seguir subiendo por la costa. No tenía ninguna parada planeada así que iría haciendo y pararía donde me apeteciese.
Pedaleaba por una vía rápida. No estaba muy seguro de que estuviese permitido pedalear por ella hasta que vi…
Que poco me quedaba
Un poco de energía no me vino mal.
Y os presento a Matt. Este surfero que me paró en la carretera para ofrecerme algo de agua y fruta. Hablamos un rato en el arcén, era surrealista, como si te paran en a C-17 y te pones a cascar allí como el que no quiere la cosa jeje.
Total, venía de surfear de Byron Bay e iba a Sothport a casa de un colega y me dijo que si yo llegaba hasta allí tenía casa para dormir, ducharme y lo que hiciera falta….esto no pasa en todos los sitios.
Aún estaba a algo más de 50km de allí. Intercambiamos números de teléfono y cada uno a seguir por su lado.
De camino a Southport
Bienvenidos a Coolangatta!!! Normalmente la gente de Brisbane pasa sus fines de semana playeros por esta zona.
Típica caseta de socorristas
Con vistas a Surfers Paradise y la Gold Coast, que son destinos turísticos por excelencia de la mayoría de australianos.
Efecto óptico o torre de pisa moderna jeje
Punto de encuentro con Matt después de una etapa de casi 150km
Instalándome en casa de Marcos, colega de Matt. El resto, David, Daniel y Luc
Punto de encuentro con Matt después de una etapa de casi 150km
Instalándome en casa de Marcos, colega de Matt. El resto, David, Daniel y Luc
La verdad es que me sentía muy agusto a pesar de no estar muy acostumbrado a este tipo de cosas. Me prepararon un batido y conversamos un rato. Era como estar metido en la peli de “Le llamaban Body”, esta gente vivían para el surf y por toda la casa veias cosas relacionadas con ese estilo de vida. Que si el buda, que si escritos en las paredes haciendo reverencias a las olas perfectas, tablas de surf, revistas….dormían en el suelo enfundados con las propias fundas de las tablas de surf, era demasiado jeje.
Cuando se acercaba la hora de cenar fuimos a buscar a Chris, otro colega y luego a un restaurante de comida orgánica con un ambiente muy particular. Era uno más de del grupo, ojalá esto pasara más amenudo y la gente fuese así de buena y confiada.
Abandonando la casa de Marcos por la mañana.
Hoy sería el último día de pedaleo antes de llegar a Brisbane y estaba muy nervioso. Además me reecontraría con mi amigo Ash, su mujer Katy y toda la family.
No me había perdido durante más de 4000km y en la última etapa casi me vuelvo loco jeje. No paraba de seguir las indicaciones a Brisbane pero todas me llevaban a la M1 que es la autopista y claro, imposible.
Como estos repechos, cientosssss!!!!
Además preguntaba a la gente y ellos andaban más perdidos que yo jeje. Uno me dijo que me quedaban unos 100km, a los 5 minutos pregunté a otro y me dijo que unas 80 millas y 5 minutos después…
Vamossssss!!!!!! Venga que ya lo tengoooo!!!!
Era para haberme visto, iba llorando y riéndome al mismo tiempo. Lloraba por que estaba tremendamente emocinado de volver a mi “segunda casa” donde había vivido algunos de los mejores momentos de toda mi vida. Después de todo no me creía que estuviese allí y que hubiese conseguido finalizar esta aventura. Yo chillaba, de verdad que lo hacía, estaba loco de contento y el cúmulo de emociones era tal que no me enteraba realmente de lo que estaba haciendo.
No paraba de hablar y recordar. Me movía por allí como Pedro por su casa…no se puede describir con palabras todo lo que sentía.
Ya estaba en Brisbane!!! Esta es es la tercera ciudad más grande de Australia. Es la capital del estado de Queensland, en el noreste del país y tiene aproximadamente dos millones de habitantes. Se encuentra al este de la Gran Cordillera Divisoria, al sureste de la cordillera Taylor y muy cercana a la bahía Moretón.
Brisbane posee un clima húmedo subtropical, con veranos calurosos y húmedos e inviernos templados y con escasa precipitación. Con sus 21ºC de media anuales puedes disfrutar de tu tiempo al aire libre prácticamente todo el año.
Como dió la coincidencia que de entré por la zona próxima donde vivía, lo primero que hice fue ir a “mi casa”
Por aquel entonces era la primera vez que compartía casa y lo hacía a lo grande…con gente de Taiwan, Brasil, Turquia, República Checa y con Pablo, un pamplonica muy enrollado.
Estaba en la zona de Kangaroo Point y lo tenía todo cerca. El trabajo…
La universidad…
Cuantas veces anduve por estas calles y por esos jardines, por los pasillos de Shafston. Gracias a la idea de venir a estudiar aquí inglés, pasé uno de los mejores años de mi vida, abrí mi mente y ahora, aquí estoy de nuevo, llegando sólo y dando pedales desde la otra punta del continente. Cuantas experiencias vividas en tan poco tiempo!!!
Este es el Story Bridge, punto de unión entre Kangaroo Point y Fortitude Valley. La de veces que lo he cruzado…andando, corriendo, pedaleando, conduciendo….
Iba recorriendo las zonas típicas por donde había pasado tantas veces y que tan buenos recuerdos me traían.
El camino flotante del río Brisbane
El camino flotante del río Brisbane
Luego pasé por el Riverside que es la zona de copas donde hay muchos restaurantes para comer o tomar algo y discotecas para salir de marcha por la noche.
Y si echas la vista atrás
Y si echas la vista atrás
luego a continuar hacia el SouthBank. En el rio no te puedes bañar, primero por que no es muy apetecible y luego por que entre las corrientes y que también se puede colar algún tiburon…yo no me lo creía cuando me lo dijeron hasta que un día ví una aleta. No se de que era pero por si acaso…
Total que para que meterse en el rio teniendo un playa artificial.
Total que para que meterse en el rio teniendo un playa artificial.
El casino
Y esto de es de un puesto de sushi, el mejor de la ciudad y donde se forman unas colas considerables
Como que ya estaba cansado, me fui a comer al Mowbray Park, el parque cercano a la universidad donde solíamos hacer BBQ con la gente de la clase. De camino vi el autobus 4x4 con el que fuimos a ver la Isla Fraser, la isla de arena más grande del mundo.
Estaba haciendo tiempo por que a las 4pm Ash salía de dar clases en la universidad y nos veríamos después de 2 años.
Me chocó muchísimo encontrarme con los que fueron mis profesores pero aún me chocó más que se acordaran de mí, aún disfrazado de ciclista y que se acordaran de mi nombre. Por esas clases pasan miles de alumnos y cada lunes entra gente nueva.
Después de saludos, comentarios y reencuetros por fín vi a Ash, un gran amigo y mejor persona.
Cargamos las cosas en su coche y en el de un compañero suyo y nos fuimos a su casa.
Me chocó muchísimo encontrarme con los que fueron mis profesores pero aún me chocó más que se acordaran de mí, aún disfrazado de ciclista y que se acordaran de mi nombre. Por esas clases pasan miles de alumnos y cada lunes entra gente nueva.
Después de saludos, comentarios y reencuetros por fín vi a Ash, un gran amigo y mejor persona.
Cargamos las cosas en su coche y en el de un compañero suyo y nos fuimos a su casa.
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